La libre competencia, el mercado libre o el libre mercado hace referencia a la situación en la que personas y empresas tienen la total libertad de poder realizar cualquier tipo de actividad económica (siempre y cuando se respeten ciertos límites). Por actividad económica entendemos todas las que tienen que ver como vendedores (u oferentes) o compradores (o demandantes).
¿En qué consiste la libre competencia?
Las empresas tienen la libertad de entrar y salir del mercado cuando quieran, establecer los precios de los productos y/o servicios que venden. La libre competencia no solo incumbe a las empresas oferentes de productos y servicios, sino también a los consumidores, que tienen la total libertad de poder elegir el bien o servicio que mejor satisfaga su necesidad. Así, un determinado comprador podrá satisfacer su necesidad de la mejor manera posible acudiendo a las diferentes ofertas que hay en el mercado.
Requisitos para la libre competencia
Para que pueda existir una libre competencia entre los agentes intervinientes, es necesario que existan ciertas condiciones o requisitos iniciales:
- Que los agentes tengan la libertad de poder ofertar y demandar los bienes y servicios que ellos quieran.
- Que se pueda ejercer sus libertades respetando los derechos de los demás agentes económicos (ya sean compradores o vendedores).
- Que exista un marco legal y totalmente transparente capaz de permitir a los agentes ejercer sus derechos.
- Que el Estado intervenga con la finalidad de: castigar a los agentes que incumplan la Ley de Competencia del territorio (así como un Organismo regulador que lo apoye); regular y supervisar las normas que están vigentes en materia de protección de la libre competencia; y poder ofrecer mecanismos o medios suficientes para la protección de los derechos de los consumidores.