Una de las cosas que más odian aquellos que tienen un blog personal es su tasa de cancelación. Te explicamos en qué consiste y cómo se puede remediar esta tasa.
La tasa de cancelación o churn rate es la tasa que indica la cantidad de clientes o usuarios que se han dado de baja en uno de nuestros servicios (normalmente de una lista de suscripción o newsletter, o cualquier otra base de datos).
¿Cómo se calcula el churn rate?
Su cálculo se realiza de la siguiente forma: Nº suscriptores perdidos en un período /Nº suscriptores que teníamos al inicio del período
Cuando indicamos «un período» nos referimos al intervalo de tiempo para el que vamos a calcular la tasa de cancelación. Esto puede variar, y somos nosotros los que podemos definir de cuánto será este intervalo de tiempo (un mes, un trimestre, un cuatrimestre, por año).
Dependiendo de cada sector y de la actividad a la que nos dedicamos, un churn rate será más o menos bajo que cualquier otro. No obstante, en líneas generales podemos indicar que un churn rate que se sitúe entre el 13 ó 15% ó superior supone un motivo para alarmarse.
Para evitar esta tasa de cancelación, algunas de las acciones que podemos acometer son:
- Tener en cuenta las campañas anteriores que hemos realizado. Revisar las campañas de email-marketing que hemos hecho y ver cómo las hemos puesto en práctica, en qué hemos fallado.
- Hacer una «re-segmentación»: volver a hacer un segmento de mercado entre el grupo de clientes que son nuestros suscriptores para asegurarnos de sus preferencias y gustos, y adaptar la oferta a dichos elementos. No debemos alejarnos de esto.
- Mejorar lo que ofrecemos. ¿Y si el problema está en lo que ofrecemos? Quizá no se ajusta adecuadamente a las necesidades de nuestros clientes o a quien dirigimos nuestras campañas. Deberemos hacer un nuevo ajuste de nuestra oferta u ofrecer aquello que realmente buscan.