El balance de apertura expresa la situación en la que se encuentra la empresa al inicio de un ejercicio contable. Es decir, es el balance que se realiza al inicio de cada ciclo contable para ver cuál es el estado financiero y la situación patrimonial al principio de cada año.
El balance de apertura en contabilidad es como un balance de situación que se realiza cada vez que empezamos un ejercicio económico. Se realiza con el objetivo de obtener una radiografía económica de la empresa que permita a los dirigentes tomar decisiones referentes a la actividad empresarial del nuevo curso. A partir de ahí, se pueden plantear cuáles son las nuevas acciones que se van a plantear en el próximo año o definir nuevos objetivos.
Una de las características del balance de apertura es que incluye el saldo de las cuentas de la empresa al final del periodo anterior, después de realizar todos los ajustes que se exigen en el Plan General Contable. Cuando una empresa realiza el balance de cierre de un ejercicio económico, éste se convierte en el balance de apertura del nuevo año.