Se entiende por FIFO un método de contabilidad diseñado para la valoración de inventarios, ya se trate de productos, materias primas o componentes. Proviene del inglés, “first in, first out” y en castellano se conoce como método PEPS, «primeras entradas, primeras salidas». Puesto que las mercancías inventariadas no se compran al mismo precio, a los efectos de valoración de inventarios es necesario tener una regla para determinar cómo han de valorarse las mercancías que quedan.
¿En qué consiste el método PEPS?
Según el sistema FIFO o PEPS, se considera que la mercancía que se vende en primer lugar es la más antigua. Por ello, los precios de las mercancías más antiguas dejan de hacer media en la valoración de inventario del resto de las mercancías que quedan en el almacén.
Presumiendo que, como regla general, y debido a la inflación, los precios de las mercancías se incrementan con el tiempo, la eliminación de los precios de las mercancías más antiguas, a efectos de valoración de inventario, en realidad supone un incremento del valor medio de los bienes inventariados.
Por su parte, y, también como regla general, a efectos del cálculo del rendimiento económico de las ventas, las mercancías más antiguas suelen tener un coste más bajo. Esto hace que, existan compañías que prefieran utilizar a efectos de valoración otros sistemas, que no resultan, a priori, tan favorables al rendimiento económico. No obstante, el seguimiento de los artículos inventariados en el FIFO es simple.
Como desventajas del sistema FIFO puede señalarse que al incrementarse el rendimiento económico por la venta de las mercancías que salen del inventario, también será mayor el importe de los impuestos que recaen sobre las mismas o sobre las operaciones. La razón que existe detrás del sistema FIFO es la necesidad de evitar la obsolescencia.
Otros métodos muy utilizados para la contabilización del valor de inventarios son el LIFO, “last in, first out·, y el precio medio ponderado.