La conciliación bancaria es un concepto muy importante en contabilidad. El concepto de la conciliación bancaria se basa en la comparación y comprobación de los datos contables de la empresa con los datos que posee el banco sobre nuestros ingresos y gastos en tesorería. Se hace con el objetivo máximo de conseguir cuadrar las cuentas de nuestra empresa y las del banco, para tener la imagen más real de la situación de la empresa.
Conocer realmente la situación de la empresa es imprescindible para tomar decisiones en el día a día. Esto se debe a que si trabajamos con información errónea podemos tomar decisiones erróneas para el funcionamiento de la empresa.
Aunque parezca algo muy complicado, realizar una conciliación bancaria es algo bastante sencillo. Tenemos que tener en cuenta que por un lado la empresa, y por otro lado, el banco, realizan su propia contabilización de movimientos. Por ello, la empresa, cada semana, 15 días o 1 mes, solicita al banco el «estado de cuenta» para ver si coinciden los movimientos y saldos. Cabe destacar que cuánto menos tiempo transcurra entre una conciliación y la siguiente, menos posibilidades existen de que existan en errores en nuestra contabilidad.
Conoce todo lo que debes saber sobre la conciliación bancaria, sus características, tipos y cómo se realiza.