El abastecimiento es un concepto que hace referencia al proceso por el que los proveedores consiguen medios para determinados grupos económicos o individuos, permitiendo alcanzar un nivel de satisfacción o utilidad en su producción.
El abastecimiento permite que se satisfagan las necesidades de consumo que tienen las personas y las organizaciones. Para ello, es necesario que haya un suministro de bienes (ya sea materias primas o productos elaborados o en circulación) o un consumo de servicios, que servirá para poder realizar las actividades de abastecimiento.
Desde un punto de vista comercial, el abastecimiento permite adquirir materiales necesario para el desarrollo de determinadas actividades económicas, siendo los proveedores los que faciliten dichos materiales. Por otro lado, tenemos que decir que el abastecimiento se conforma como un proceso básico y necesario para la subsistencia y consecución de los niveles de satisfacción de las personas, siendo parte fundamental de estas.
Por otro lado, desde el punto de vista económico, el abastecimiento puede formar parte de la organización logística de una empresa, formándose la cadena de suministro de dicha empresa.
Para que esto suceda, es necesario que exista cierto control, cohesión y coordinación entre los puntos que unen dicha cadena: controlar las fases del proceso de oferta de productos de proveedores y la distribución de los bienes y servicios hasta el consumidor final.
La gestión de stock juega un papel fundamental en este sentido, pues el abastecimiento permite que se cumplan los requisitos y las exigencias en los tiempos requeridos. Al cumplirse esto, la eficiencia de los bienes y servicios fabricados, junto a sus correspondientes niveles de demanda se verán mejorado, efectuándose buenas entregas de bienes y servicios y una correcta atención al usuario.