Maquila es un término que se usa en el contexto de la administración, de la organización de la empresa, negocios y gestión. En concreto, suele ser utilizado para hablar de aquellos inputs o tecnologías que se adquieren importándose y empleándose una mano de obra local, destinada a producir productos para su posterior exportación.
En concreto, la maquila permite a las empresas poder producir los productos y servicios que ellas desean a un coste de la mano de obra del país más económico. Tampoco tienen en cuenta los costes de los aranceles vigentes en dicho país.
El país receptor de la maquila se ve beneficiado al entrar nuevas materias primas y mano de obra a su país, así como de la generación de empleo, por lo que la economía regional será impulsada (a menos que la mano de obra sea subcontratada).
En algunos países como Paraguay o México, la producción mediante maquilas puede permitir la importación temporal con suspensión de impuestos sobre estas materias primas que serán necesarias para la fabricación de los productos. Esto puede ser muy ventajoso para las empresas, pues pueden ahorrarse una gran cantidad, y consecuentemente obtener más beneficios.
También existen casos en que los bienes importados son demasiados y se deciden vender. Hay casos en los que parte de dicha cantidad se puede vender, aunque esto dependerá de la ley del país en cuestión (que establece la cantidad a poder comercializar).
Por último, tenemos que mencionar que en el sistema tributario para estas empresas que han importado (que se basa en conceptos del valor agregado) no se incluyen las mercancías que hayan sido enviadas, ya que están sujetas al régimen de importación temporal.