El Reino Unido se adhirió a la Comunidad Económica Europea (más tarde, la Unión Europea) el 1 de enero de 1973; sin embargo, el 23 de junio de 2016 se convocó un referéndum sobre la pertenencia de este país a la UE, que arrojó un resultado favorable a la salida del Reino Unido de la Unión Europea. Esta situación se conoce popularmente como brexit, un término acrónimo de las palabras inglesas Britain Exit, y hace referencia a la decisión de Reino Unido de poner fin a una relación con la UE de más de cuatro décadas.

Pero, ¿cuáles son las consecuencias políticas y económicas del Brexit? Resolvemos todas tus dudas acerca de la salida del Reino Unido de la Unión Europa y de qué forma va a afectar esta situación al panorama económico mundial.

Consecuencias económicas del Brexit

La caída de la libra esterlina (la moneda británica), el precio del petróleo y las bolsas fueron las primeras consecuencias directas del Brexit, pero no son ni serán las únicas. La salida del Reino Unido de la Unión Europa va a restringir las relaciones comerciales, económicas y financieras entre Gran Bretaña y el resto de los países miembros de la UE, aunque si bien se baraja la posibilidad de que el propio Reino Unido pueda negociar acuerdos comerciales con la Unión Europea una vez que el brexit sea efectivo.

Otra reacción a la salida del Reino Unido de la UE es que los ingleses podrían perder su representación en las instituciones económicas, sociales y políticas europeas. Asimismo, Londres perdería una gran cantidad de empleos, puesto que muchas empresas deberán mudarse a otras ciudades de la eurozona y se calcula que el PIB británico bajará entre un 1,5% y un 9,5%, en general.

No solo las empresas y la política inglesas serían las más damnificadas por el brexit, sino también el turismo y las industrias automovilística, alimentaria, farmacéutca y aeronática, salvo que se lleguen a pactos favorables entre ambas partes.