Cuando hablamos de subasta nos referimos a una venta organizada en la que existe competencia directa y pública (aunque también se puede dar privada) en el que un vendedor ofrece diferentes productos y el comprador o diferentes compradores puede ofrecer diferentes precios a pagar para poder adquirir dicho bien.

Cuando la subasta es cerrada, el bien pasará a ser parte de la persona que haya ofrecido más por él. Se entregará el dinero o cantidad de artículos que equivalgan al bien (y esté estipulado como permitido) a cambio de dar el bien.

El objetivo principal de la subasta es poder vender un producto a un precio superior o subjetivamente valorable por los consumidores. De este modo, cuando la subasta empieza y los compradores ven los productos, ofrecerán un precio por los diferentes artículos.

Tipos de subastas

Aunque la idea principal ya la hemos contado, existen diferentes tipos de subasta que detallaremos a continuación:

  • La subasta inglesa (o ascendente). Es la más común, en la que los posibles compradores ofrecen un precio cada vez más superior por el bien que se oferta. Quienes están en la subasta pueden observar qué es lo que puja los demás compradores y decidir si aumenta o no la cantidad que han ofrecido.
  • Holandesa (descendente). En esta subasta se parte desde un valor y se va reduciendo la cantidad que los compradores pagarían por el bien hasta que uno de ellos decide parar la subasta y llevarse el bien a la cantidad parada. A diferencia del anterior, los participantes no pueden observar las ofertas de los demás, ya que solo pueden parar la subasta en función del riesgo que hagan los demás.
  • Española (holandesa modificada). Suele ser utilizada cuando se subastan varios bienes o letras del tesoro en España. Se establece precio mínimo para los bienes no conocidos, y tienen 2 tipos de ofertas: competitivas (se puja a un precio concreto) y no competitivas (se acepta precio final sea cual sea).
  • De sobre cerrado. Los compradores ofrecen su oferta en un sobre cerrado y es elegido el de mayor precio, sin poderse ver quién ha ofertado más o menos. Una variante de esta subasta es hacer lo mismo, pero diciendo cuál es el segundo precio más alto, y luego volviendo a hacer otra subasta final (crea incertidumbre por los participantes y los precios suben).