El llamado crowding inefecto atracción se refiere a los estímulos que, mediante el gasto público, se ejercen sobre la economía. Es un efecto expansión del sector público, ya que introducen en la economía gastos que la favorecen. Al mismo tiempo, es un gasto expansión al sector privado, ya que la finalidad principal de este estímulo es disponer de capital necesario para generar proyectos que nos den rentabilidad. Al contrario del efecto desplazamiento encontramos el crowding out.

La inversión gubernamental induce a un aumento de la demanda interna que atrae, a su vez, la inversión privada de otras empresas. Por otro lado, si la inversión gubernamental es financiada mediante préstamos, la tasa de interés del mercado aumenta y desalienta la inversión privada.

Existe una relación entre la repercusión de la inversión privada y la inversión pública, así como las cifras que se manejan. De este modo, podemos observar que las cifras de inversión privada y las cifras de inversión pública se relacionan positivamente, aumentando de manera porcentual una cifra a la par que la otra. Por otro lado, la inversión en infraestructura debe mantenerse o, en todo caso, mejorar su composición ya que podríamos modelizar variables económicas y observar la tendencia para ver cómo afecta el crecimiento de la economía nacional.

Por último, vamos a destacar que el estado perfecto de la economía sería la consolidación fiscal a lo largo del tiempo. Esto se consigue facilitando el mantenimiento de tipos de interés reducidos, generando un efecto de llamamiento a la inversión privada e impulsando un crecimiento económico que no es inflacionista (en ocasiones, la creación de empleo también es viable).