La economía normativa es un tipo de visión económica que trata de dar recomendaciones, hacer políticas o acciones en base a las opiniones personales (o subjetivas) de lo que se debería hacer.
El objetivo de la economía normativa es identificar los objetivos deseables para aplicar el conocimiento de economía positiva para lograrlos. La economía positiva es la que explica fenómenos económicos de manera objetiva, es decir, tal y como es.
Objetivo de la economía normativa
La información que intenta transmitir la economía normativa parte de una determinada situación y de una teoría económica dada. La economía normativa hace un juicio de dicha situación, ofreciendo un dato a propio valor del economista para seguir un determinado curso de acción.
El economista es tratado como economista normativo, que es aquel que realiza juicios en base a relaciones causa-efecto no objetivos. No obstante, esto no quiere decir que no se tenga en cuenta la opinión objetiva de la teoría, sino que se incluirá ambos: opinión subjetiva y la teoría (la parte objetiva).
Economía normativa y los juicios de valor
Como hemos dicho, la economía normativa se basa en función de una serie de valores que el propio economista considera oportunos incluir.
Entre estos valores, hay algunos que tienen un mayor peso en la opinión del economista que otros. La política, la ética o la religión o creencias hacen mucho más que cualquier otro. No obstante, hay quienes opinan que las propias corrientes de los pensadores y economistas más famosos ya están enjuiciadas desde el primer momento