La capitalización compuesta es una de las formas en que se puede realizar el cálculo de un interés, siendo la capitalización compuesta la que en su cálculo tiene en cuenta no solo el importe del capital -tal y como ocurre con la capitalización simple o interés simple- sino también el importe acumulado en concepto de interés hasta la fecha del cálculo.
De esta forma, con la capitalización compuesta el capital final está compuesto por el capital inicial, el interés resultante de éste y el interés resultante de incorporar el interés de cada periodo al capital inicial.
La aplicación de la capitalización compuesta o interés compuesto resulta especialmente beneficiosa en el cálculo de los intereses remuneratorios derivados de un depósito o inversión, en cuyo caso el importe calculado en concepto de interés en cada periodo se acumula al capital inicial generando intereses de nuevo, un proceso que en economía recibe el nombre de capitalización.
Fórmula de la capitalización compuesta
Para conocer el capital final resultante tras la aplicación de una capitalización compuesta se deben conocer, además del capital inicial, la tasa o tipo de interés y el periodo de tiempo a considerar para el cálculo.
Fórmula de interés compuesto para el primer período
Para conocer el capital resultante tras la aplicación de una capitalización compuesta durante el primer período de tiempo se aplica la siguiente fórmula:
C1 = C0 × (1 + i)
Donde:
– C1 es el capital final resultante tras la capitalización en el primer periodo.
– C0 es el capital inicial.
– i es el tipo de interés.
– n es el número de períodos de tiempo.
Fórmula de interés compuesto para un determinado período
Para conocer el capital resultante tras la aplicación de una capitalización compuesta durante un determinado período de tiempo se aplica la siguiente fórmula:
Cn = C0 × (1 + i)n
Donde:
– Cn es el capital final resultante tras la capitalización.
– C0 es el capital inicial.
– i es el tipo de interés.
– n es el número de períodos de tiempo.
