Cuando hablamos del concepto de cupón corrido hacemos referencia al interés que se devenga hasta una fecha del cupón de un título de renta fija que estemos considerando. Pues que dicho interés se devenga, éste se va acumulando desde la fecha del último pago, para poder hacerse a la siguiente.

Vamos a explicarlo: cuando adquirimos un título de renta fija prestamos nuestro dinero a cambio de recibir el valor del título al final junto a unos intereses, que serán recibidos según una periodicidad (por semestres, trimestres, anual, etc). El cupón corrido es la parte del interés del bono (o cualquier título de renta fija) que se va acumulando día tras día.

Obviamente, cuanto más tiempo ha pasado desde la fecha del último pago de cupones, mayor será el interés devengado, así como los intereses devengados, por lo que el cupón corrido es mayor.

También hay que tener en cuenta que, cuando vayamos a comprar un bono habrá que asumir los intereses que se han devengado al precio de cotización (conocido como precio ex-cupón). El precio total de bono es el resultado de sumar al cupón corrido el precio ex-cupón de dicho bono, siendo ésta cantidad la que tendremos que pagar por él.

Esto último es muy importante, ya que muchas veces cuando adquirimos algún bono con estas características no tenemos en cuenta dicho aspecto que, además, incrementa el precio que pagamos por el bono, pudiendo llegar a ser una sorpresa para muchos.